Porque aunque de nada tengo mala conciencia

“¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo? Hebreos 9:14” Bajo la ley de Moisés el hombre tenía que continuamente trabajar para aliviar su conciencia. Continuamente tenía que ofrecer sacrificios […]