“Sabed, pues, esto, varones hermanos: que por medio de él se os anuncia perdón de pecados, y que de todo aquello de que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree. Hechos 13:38,39″
Pablo y Bernabé comienzan su ministerio con un mensaje muy claro desde el principio. Hablándole a los que estaban bajo la ley de Moisés (“varones Israelitas v.16), Pablo les declara con palabras precisas que “todo aquellos que la ley de Moisés no justificó, ahora bajo el nuevo pacto ya es justificado”.
Imagínate, que tu estés tratando de guardar todos los preceptos que te dijo el ministro que tenías que guardar, y por tanto que trates nunca resolverá totalmente tu problema, y tu conciencia lo sabe.
Ahora viene Pablo y te dice: “Todo eso está arreglado… Cristo lo arregló por ti.
¿Qué es mejor? ¿Seguir tratando de cumplir algo que nunca termina, o aceptar algo que ya está completado?
¿Que dices?