“Entonces la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de él, y se volvió estatua de sal. Génesis 19:26”
No todos los milagros son buenos… por lo menos, no todos favorecen al recipiente. Sin embargo de todos podemos aprender algo, como en el caso de la mujer de Lot, a no mirar atrás.
El mejor beneficio que hoy recibimos de este milagro es a no mirar atrás. Mantener nuestra vista hacia adelante. Dejando detrás el pasado y no distraernos a querer regresarnos cuando las cosas se ponen difícil.
“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. Filipenses 3:13-14”
Padre, en esta hora entendemos que debemos mantener la vista en lo que está delante. Gracias por mantenernos en fe y sin vacilar, enfocados en lo que tu has puesto delante de nosotros. En Cristo Jesús. Amen.