A veces tengo la impresión de que nuestra idiosincrasia nos habla más fuerte que las palabras del predicador…
Tenemos que influenciar con tal fuerza que la voz del Evangelio sea mucho más fuerte que la idiosincrasia – Jesús le dijo a los judíos: “habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición Mt 15:6”